UN VIAJE A TRAVÉS DE LAS FIESTAS JUDÍAS
¡Hola a todos!
¡Qué bueno conocerlos! En mi trabajo me encuentro con muchas personas, pero a ustedes aún no los conocía. Ustedes tampoco me conocen…como siempre, comencé a hablar sin presentarme como es debido.
Así es: me llamo Aliza, pero todos me dicen Lizzy. Yo vivo en un kibutz en el centro del país, no lejos del mar, y tengo un hijo genial llamado Shlomi.
Yo sé, todos dicen que sus hijos son geniales, pero Shlomi en verdad es un niño estupendo.
En lo profesional, soy chofer, y para mí es un trabajo buenísimo. A veces llevo estudiantes a paseos a lo largo del país en autobús, a veces llevo turistas en un vehículo particular y a veces llevo grupos pequeños en pickup. Nunca me aburro.
A veces siento que el tiempo pasa muy rápido.
Es por eso que este año decidí ir tras cada festividad y conmemoración, una por una, para prestar más atención al tiempo que transcurre y para estar más vinculada a esos días.
Los invito a unirse a mí en esta travesía. Primero, podrán leer la cartelera de anuncios que está colgada en el comedor del kibutz, y así sabrán qué ocurre con nosotros en cada fecha y cada jag. Luego les contaré acerca de cosas interesantes que me suceden en mis viajes, y sobre los nuevos pensamientos que tuve en relación a cada festividad.
¿Saben? Yo siempre converso con mis pasajeros y ¡ellos siempre me renuevan! Cada uno es tan diferente del otro, y también de mí, y por eso nuestras conversaciones me hacen pensar en cosas que nunca había considerado antes.
¿Les parece? Entonces, ¡adelante! Abróchense los cinturones, salimos al camino,
¡los invito a buscar juntos nuevas ideas!